Ambos fueron criados por madres adolescentes y solteras y con pocos recursos económicos. Una emocionada Selena afirma cómo era su vida cuando era una niña. “Mi madre tenía tres trabajos diferentes. Aun así, en casa nunca había dinero suficiente. Ni siquiera teníamos dinero para gasolina”, cuenta la joven.
Una situación muy dura y muy similar a la experimentada por su novio, quien relata que “tenía que dormir en un sofá por no tener cama”.
Pero su suerte cambió. Selena saltó a la fama en 2007, gracias Wizards of Waverly Place, de la factoría Disney. Un papel que la convirtió en una de las estrellas más seguidas por los adolescentes y que cambio su vida por completo, al igual que la de su chico Justin, quien tras ser descubierto por Usher lo catapultó a la fama, lanzándole a los primeros puestos de las listas de medio mundo.
Hoy por hoy, ambos se muestran encantados con su éxito profesional, pero aún más por haberse conocido. “Es un regalo poder compartir mi vida con una persona que tiene unos valores familiares tan fuertes como Selena”, se sincera Bieber.
Desde luego, Justin y Selena no pueden pedir más a la vida y después de contar sus más íntimos secretos de la infancia, han dejado bien clarito que su relación es mucho más que un amor de adolescentes.
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